Hay tantas cosas qué ver en Mandalay que merece la pena pasar al menos 3 noches en la antigua capital de Myanmar. No apostábamos demasiado por ella, quizá al pensar que podía ser otra bulliciosa ciudad asiática. Mandalay esconde muchas cosas, pero sus mayores encantos están a su alrededor. El día representa visitar espacios que no pensabas que estaban tan cerca de una gran ciudad. La noche, si te la recorres bien, puedes disfrutar de espectáculos milenarios, llenos de gracia, y sobre todo con pasión, tal como son los Birmanos, personas llenas de vida y que por ahora, no se esconden ni les intimidan los turistas.
Después de 11h de crucero, 35$ por persona, bajo la lluvia desde la increíble Bagan llegamos a Mandalay. El crucero no cumplió lo que esperábamos por el mal tiempo o por su excesivo precio. Poco o nada vimos desde la cubierta. Al llegar al embarcadero, como en todo Myanmar, tocó pagar el impuesto revolucionario del turista, 10$ por persona, que te da acceso a ver los templos de la ciudad. Cierto es que cuando pagas de esta forma te sientes mal, pero una vez que te adentras en lugares como éstos dejas atrás esos impuestos sin sentido para dar paso a la recreación de tu vista por las maravillas que vas a llegar a ver.
Mandalay a diferencia de Yangon esta repleta de motos y bicicletas, como las grandes urbes asiáticas. Para ver los mejores lugares a pie es prácticamente imposible, salvo el Palacio de Mandalay o la principal colina de la ciudad. El resto está a las afueras, por lo que decidimos recorrer Mandalay en motocicleta, la mejor opción de todas.
Mandalay en motocicleta
¿Y por qué no?. En Yangon estaban prohibidas, pero curiosamente en Mandalay no. Aunque no vimos casi turistas, por no decir ninguno, alquilar una moto es la opción más económica y rápida para poder moverte por Mandalay y alrededores. Por 12.000 MMK al día tienes una, menos de lo que cuesta un taxi para ir a U Bein.
Estoy seguro que estarás pensando, ¡que locos!, con lo caóticas que son esas ciudades. Vamos a ver, conducir por estas ciudades no es fácil, hay que estar atento a todo. Los semáforos casi no existen, los cruces son un poco locura, pero la emoción de ser un habitante más no tiene precio. No nos sentimos inseguros. Las carreteras están asfaltadas y si conduces con cuidado no tiene porque pasarte nada. Después de dos días con la scooter en Mandalay nos quedamos con una cosa, ¿por qué no la alquilamos el primer día?.
¿Qué ver en Mandalay?
Mandalay tiene para varios días por diversos motivos. El primero es por su tamaño. Las cosas que hay que ver son realmente enormes y si tarda en acceder bastante a ellas. Nuestra visita a Mandalay la dividimos en dos etapas. La primera, cuando llegamos de Bagan, con dos noches, y la tercera, dándonos un «descanso» para hacer un trekking en Hsipaw. A la vuelta de la ruta, pasamos la tercera noche antes de partir al Lago Inle y recorrer sus parajes en barco y en bicicleta.
Una de las cosas que más nos divirtió de Mandalay fue localizar los pocos restaurantes de corte europeo de la ciudad. Objetivo, degustar el vino de Myanmar con una buena hamburguesa, que después de tanto arroz y pasta estas cosas apetecen. Una de las noches incluso fuimos al cine para vivir una experiencia local, y nos encontramos que antes de cada película los birmanos tienen que levantarse de sus butacas y cantar el himno nacional.
Estos son los mejores lugares para disfrutar de verdad Mandalay y porque no, de los restaurantes «salvavidas» si te apetece volver a la cocina de mamá.
El Palacio de Mandalay
Cuando nos preguntan qué ver en Mandalay, uno de los sitios que nos viene a la cabeza es el Palacio de Mandalay, una de las mejores reconstrucciones del país y uno de los lugares obligados a visitar. Poco del original queda, pero merece la pena soñar al esplendor que llegó a ser este palacio.
Si tomas un mapa de la ciudad, el palacio no tiene pérdida. Por sus dimensiones, colosales y que se tarda más de 20 min en recorrer a buen pie cada lado de este cuadrilátero de dimensiones colosales.
Para más información, visita nuestro artículo del Palacio de Mandalay.
El Puente de U Bein
U Bein, el puente de teca más largo del mundo, es uno de los puntos turísticos más visitados de Myanmar y está situado en la ciudad de Amarapura, junto a Mandalay. La mejor hora para ir al puente de teca, la de la puesta de sol para ver los reflejos en el lago de los barqueros cruzando el lago. Otra buen momento es a primera hora de la mañana, para ver a los monjes cruzar el puente.
Para más información, visita nuestro artículo sobre el puente de teca más largo del mundo.
Mandalay Hill
Mandalay Hill tiene posiblemente las mejores vistas de toda la ciudad. Se accede desde uno de los laterales del Palacio de Mandalay después de sortear cientos de escalones y mercados improvisados. Ascender a la colina es como ir cambiando de planta en un centro comercial. Cada nivel de la colina tiene algo que mostrarte. Un Buda desafiante, un mercado, un mirador o un lugareño con ganas de hablar en tu idioma o en inglés. La mejor hora, la puesta de sol.
Para llegar a ella lo mejor es llegar a la base en moto o bicicleta y subir a pie la colina por un sin fin de escaleras. La subida se hace en unos 30 minutos y descalzo como en todos los templos del país. El coste de la entrada es de 1.000 MMK.
Como anécdota a la vuelta tomamos un rickshaw que regentaba un hombre de avanzada edad. Nos llevó a dos personas a más de 5km. Hubo un momento que quisimos parar, ya que aunque sea su oficio no deja de ser muy sacrificado y duro, pero siempre el hombre nos devolvía la respuesta con una increíble sonrisa, como es todo en Myanmar. La verdad, pensábamos que reventaba el buen hombre…
Mahamuni pagoda
Situada al sur de la ciudad, no es fácil llegar a ella, al estar en un barrio lleno de estrechas calles. Ya en su interior, es un clásico templo budista donde hay un Buda de oro, al que no permiten a las mujeres acercarse a él. Este Buda pesa nada menos que 6 toneladas, debido al bronce que hay en su interior, más los 5cm de espesor de oro que le cubre hace que sea uno de los Budas más venerados de Mandalay. Coste de la entrada 1$.
Sagaing Hill
Sagaing esta situada en la orilla suroeste de Mandalay, a unos 20 km del centro y a 7km del puente de teca más largo del mundo, el llamado U Bein. Desde la orilla de Mandalay se puede llegar a ver la sucesión de colinas de Sagaging con sus templos en cada cima y los puentes colgantes para acceder a ellas.
Para más información, visita nuestro artículo sobre Sagaing Hill
El espectáculo de las marionetas
No muy lejos del Palacio de Mandalay hay un espectáculo que no hay que perderse. Coste de la entrada 20$. El vídeo lo describe todo. Ver vídeo del comienzo del artículo.
Datos prácticos
¿Cómo llegar?
Compañías como Air Bagan, Air Mandalay o Yangon Airways vuelan directamente desde Yangon. Todas tiene más o menos el mismo precio al pertenecer principalmente al estado.
El coste para salir del aeropuerto de Mandalay es de unos 8.000 MMK por persona, ya que está a casi 30km de la ciudad. Si volais con Air Asia desde Bankok, hay un shuttle gratuito.
¿Dónde comer/cenar?
Hay muchos lugares en Nyaungshwe donde poder disfrutar de la comida china o tradicional de Myanmar, os dejamos los restaurantes que ganaron nuestro paladar:
- Cafe city. Una escapada de la comida local donde podrás encontrar pizzas, hamburguesas y comida internacional. A parte, puedes degustar el vino de Myanmar por 13.000 MMK la botella.
- Sky bar. Con vistas al Palacio de Mandalay, es un buen lugar para tomarse una copa mientras ves desde la terraza el tráfico de Mandalay.
- Diamond Plaza. Uno de los nuevos centros comerciales con corte «occidental», con cines, tiendas y los nuevos cajeros automáticos de Myanmar.
¿Dónde dormir?
Precio bajo
- Yanapardon. Lujo desde 34€.
- Hotel 78. es muy básico, pero no le pidas más por 20€.
Precio medio
- Ayerwaddy. Una pasada para costar 50€. Tiene hasta piscina.
Precio alto
- Rupar Mandalar Resort. Esto si que es lujo asiático. Habitaciones desde 184€.