Una de las visitas claves a Roma es la visita a los Museos Vaticanos y a la famosa Capilla Sixtina. Es una de las citas que te llevará más tiempos pos sus dimensiones y que conviene preparar con tiempo y sobre todo, comprar las entradas con antelación. Hoy queremos daros varios trucos para que disfrutéis al máximo de esta visita.
Visita a los Museos Vaticanos
Todo sobre este viaje
Comprando las entradas con tiempo
Si hay un recuerdo que se lleva mucha gente de Roma más allá de las atracciones turísticas, son las colas para acceder a los Museos Vaticanos. Colas que rodean el Vaticano y centenares de personas esperando a poder entrar en uno de los museos más famosos del mundo.
Lo sorprendente es ver cómo el ser humano no aprende. Para acceder a este museo y a otros de todo el mundo casi siempre hay dos colas. La larga e interminable, para los que no reservan, y la rápida y accesible, los que compran la entrada por Internet (unos 17€). También existe la opción de adquirir la Rome Card que incluye la Omnia Vatican, que de exime de cualquier tipo de cola.
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Cuanto antes, mejor
¿No estas en Roma?. Pues al que madruga, Dios le ayuda. Nosotros compramos la entrada por internet en la página oficial, una web un tanto dura a la hora de comprar por el interfaz, el idioma y porque tardan un poco en enviarte la entrada. En cualquier caso, compramos la entrada para las 9:30 y llegamos a las 9. Ni tuvimos que esperar, ni hicimos colas, entramos directamente, muy, muy fácil.
Id directamente a la primera planta para validar la entrada en las máquinas automáticas justo antes de los tornos de acceso
Recorriendo los Museos Vaticanos
El Palazzo Apostolico Vaticano
Los Museos Vaticanos están ubicados dentro del Palazzo Apostolico Vaticano, que comprende dos grandes estancias o palacios. El Palacio Vaticano y el Palacio Belvedere, ambos unidos por dos largas e impresionantes galerías.
Estos palacios albergan una de las pinacotecas más importantes del mundo, donde destacan obras de Rafael como La Transfiguración, su última obra, de Tiziano, Giotto, Caravaggio o Leonardo Da Vinci, con su cautivador e inacabado San Jerónimo.
En uno de los pasillos alargados está el Museo Chiaramonti y el Braccio Nuovo, con paredes flanqueados por bustos y estatuas, y que con la entrada de luz por los grandes ventanales del palacio a primera hora de la mañana, da un aspecto cinematográfico y un tanto pintoresco a este rincón del Palacio Belvedere.
Capilla Sixtina
Pero sin duda si hablamos de un lugar al que todo el mundo quiere visitar, ese lugar sin duda es la joya del Vaticano, la Capilla Sixtina, lugar de obras de artes tan célebres como el el fresco del techo del Juicio Final de Miguel Angel.
Es de las pocas instancias que no se pueden hacer fotos salvo con autorización. La obra que esta expuesta en la Capilla Sixtina es una obra de nada menos de 800m2, con detalles mimados, con fuertes colores y una narrativa que ayuda que puedas pasar horas contemplando esta impresionante obra de arte.
Conviene llevar una audioguía para disfrutar al máximo de este espacio
Finalizando la visita
Para finalizar la visita nosotros pasemos por los jardines que están abiertos del Vaticano para acabar el la famosa escalera de Bramante, único punto de salida de los Museos Vaticanos. Esta escalera es famosa por la forma de doble hélice que tiene, pero pocos saben que en realidad es una copia, una copia de la escalera que se encuentra en el Museo Pio-Clementino, generalmente no abierta al publico.
Conclusión
La visita a los Museos Vaticanos te puede llevar perfectamente una mañana completa, salvo que quieras ir a ver alguna obra concreta y por tanto pasar de largo muchas de las galerías que se exponen. Por eso recomendamos planificar bien la visita y sobre todo, decidir si se desea hacer esta visita si tu estancia va a ser muy corta en Roma. En cualquier caso, es una visita claramente recomendada.
Datos prácticos
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¿Cómo llegar?
A Roma
Existen dos aeropuertos relativamente cerca de Roma. El más grande es el Aeropuerto de Leonardo Da Vinci ó Fiumicino, a unos 30 km del centro de la ciudad. El otro aeropuerto, Ciampino, es más pequeño y ampliamente utilizado por las aerolíneas de bajo coste. Curiosamente está mas cerca del anterior, a sólo 15km del centro.
Ambos aeropuertos tienen líneas de tren y autobús para conectarse con la ciudad.
A los Museos Vaticanos
Para acceder a los Museos Vaticanos hay que ir a la entrada principal, en la Viale Vaticano. Ver en Google Maps.