Cuando hablamos de los mayas en Guatemala siempre nos viene a la cabeza Méjico y Chichen Itzá, reconocida como una de las siete maravillas del mundo, o Tulum. Seguramente porque se sitúan en las zonas más turísticas del mundo, la península de Yucatán, pero fuera de la perspectiva del turismo de masas o por intereses económicos, las mejores ruinas mayas están en Guatemala y Belize seguidas por Méjico.
Yaxhá, situada al norte de Petén, es un claro ejemplo de los mayas en Guatemala. Es de esos sitios de poco nombre eclipsado por su vecino e increíble Tikal y personalmente con Caracol, Belize, son de los mejores lugares desde el punto de vista arqueológico o paisajistico del mundo Maya, traducido al castellano, Agua verde, ya que es una ciudad construida sobre unas pequeñas islas conectadas por calzadas y canales.
El complejo arqueológico de Yaxha
En nuestro viaje, un viaje que recorría Yucatán, Belize y Guatemala en un 4×4 de alquiler con 6 amigos de Madrid, tuvimos que sortear los imprevistos de llevar un coche de México a Guatemala con los problemas que conlleva el papeleo, éste último inexistente y que después de unas cuantas horas rogando y casi mendigando nos dejaron atravesar la frontera desde San José Succotz en Belize a Guatemala.
Con las ansias de ver por primera vez algo de los mayas en Guatemala, aunque en mi caso ya visité Guatemala hacía 5 años, nos encontramos en una carretera polvorienta un cartel que indicaba Yaxhá. ¿Yaxhá?, si apenas la menciona la Lonely Planet, ¿y por qué no?. Todo lo que sea evitar la Lonely y explorar, bienvenido sea, pensamos… Y la verdad, que descubrimiento de los mayas en Guatemala tuvimos con Yaxhá.
Pasado el pueblo de El Remate, llegamos a Yaxhá y lo primero que nos llamó la atención fue ver que las estructuras de sus edificios son algunos similares a Tulum. En aquellas ruinas pudimos contemplar una excelente vista a la laguna de Yaxhá y Sacnab en Petén, ya que éste emplazamiento arqueológico se sitúa en una zona elevada y a su vez en un marco incomparable. Aunque no ocupa un lugar demasiado extenso, 3 kilómetros, posee más de 500 edificios con calzadas.
Adentrándonos como si fuéramos unos antiguos exploradores, total, estábamos solos, ¿por qué no explotar nuestra imaginación?, nos topamos de frente con el Templo 216, un imponente edificio de 37 m de alto desde se puede ver tanto la laguna como toda la selva que rodea el complejo. Como en muchos templos mayas, uno de sus principales atractivos de cara al turismo son sus atardeceres y el Templo 216 no puede ser menos.
Bajando con cuidado y accediendo desde la unas de los calzadas divisamos una acrópolis con 3 edificios a cual más espectacular, uno enfrente de otro, dando sombra a una pequeña plaza y demostrando lo grandioso que fueron los mayas en Guatemala.
Después de 2 horas, regresamos al coche y tomamos rumbo a Flores para ver Tikal, la joya de la corona de la cultura Maya, pero esto es otro viaje y es otra historia. Javier Blanquer.
Datos prácticos
¿Cuándo ir?
Yaxhá abre de lunes a viernes entre las 8 y las 5 de la tarde. De Enero a Abril, con un clima más seco, es la mejor época para visitar la zona, aunque es visitable todo el año, incluso en temporada de lluvias.
¿Cómo llegar?
Desde Flores se tarda no más de una hora, parte por asfalto y parte por tierra.
¿Que llevar?
El recorrido es aproximadamente de dos horas, por lo que llévate agua, repelente antimosquitos y algo de picar. Si vas hacer alguna travesía en lancha por el lago no vendría bien un buen sombrero, el calor es sofocante.
¿Dónde dormir?
Puedes acampar en la orilla del lago de Yaxhá en un pequeño campamento. Desde luego una increíble experiencia fuera de las ordas de turistas de Tikal.