Hace un tiempo describimos la ascensión al Triglav desde Rudno Polje, un centro deportivo orientado al biatlon y desde donde sale una de las rutas mas comunes a esta montaña. Hoy os proponemos subirlo desde otra vertiente, concretamente desde el famoso lago Bohinj, el lago mas grande de Eslovenia. Una vertiente quizás mas dura inicialmente pero que se verá fuertemente recompensada por las maravillosas vistas que nos aguardarán por el camino.
Triglav desde el lago Bohinj
Una de las rutas de senderismo mas bonitas que podemos hacer por Eslovenia es subir a su pico mas alto, el Triglav, desde el lago Bohinj. Una ruta exigente, sorteando grandes distancias y sobre todo fuertes desniveles que nos obligaran pasar varias noches en refugios o tiendas de campaña.
El Triglav es una montaña alta, de 2864m de altitud y con una forma tan rocosa que parece inexpugnable. Como suele suceder en muchas partes de Europa, las montañas han caído rendidas a las vías ferrata y muchas de ellas con un simple arnés son capaces de ser conquistadas y el Triglav no falta en esa lista.
Dos o tres días son suficientes para llegar a su cima, pero se recomienda pasar algún días mas para disfrutar de los bellos paisajes que la rodean, llenos de lagos, grandes barrancos y una naturaleza que rebosa color y vida.
Día 1: Partiendo desde el lago Bohinj
Para subir al Triglav desde el lago Bohinj, tenemos que dirigirnos a la cascada de Savica, un salto de agua bastante turístico y dentro de las mejores cascadas de Eslovenia. Allí mismo hay un parking donde podemos dejar el coche y un pequeño restaurante donde poder darnos nuestro último festín antes de comenzar la larga ruta.
Partimos a una hora muy temprana situados a unos 653 metros de altitud y teníamos pensado dormir en el refugio de «Koça pri Triglavskih jezerih» a unos 1685m, teniendo que salvar mas de 1000 metros de desnivel sin contar los posibles vaivenes del camino.
Desde el parking de Savica hay un sendero en dirección norte que cruza el bosque hasta ponerse en la empinada falda de la montaña, una verdadera pared que sorteamos con ayuda de escaleras y pasa manos de metal. Dicha pared tiene alrededor de 600 metros de desnivel y francamente parece interminable.
Durante el ascenso por la pared mis compañeros decidieron ponerse el caso debido a la caída de piedras y porque había algún paso que estaba un poco expuesto. No era momento de arriesgar y tampoco teníamos ninguna prisa.
Una vez arriba llegamos al lago Črno, pequeño pero suficiente para el quisiera darse un chapuzón. Nosotros no lo saltamos directamente hasta alcanzar una pared completamente vertical tras atravesar un bosque bastante frondoso. Con la pared a nuestra derecha comenzamos a subir una pendiente suave cruzándonos con senderistas que bajaban del Triglav.
Quedaba poco para llegar al Koça pri Triglavskih jezerih, nuestra primera noche pero antes teníamos que cruzar unos cuantos lodazales que nos obligaron a salirnos del camino e ir directamente campo a través. Al menos las vistas eran muy bonitas.
Con todo esto tuvimos que limpiarnos las botas del barro acumulado, pesando mas de la cuenta y mas mojadas de lo que esperábamos. Al menos el refugio ya lo teníamos al lado y solo teníamos que armarnos de algo de papel para quitar la humedad de nuestro calzado.
Día 2: Destino el refugio Dom Planika
Tras pasar una noche la mar de calentitos y con el estómago lleno tras una cena copiosa, comenzamos el segundo día con dirección al Dom Planika, a 2401 metros. Nos separaban de nuevo mas de 1000 metros de desnivel pero con el tiempo tan bueno que teníamos los ánimos estaban por las nubes.
Desde el refugio comenzamos a cruzarnos varios lagos de diversos tamaños como el Veliko jezero a 1831 metros y el Zeleno jezero, bastante mas pequeño que el anterior pero que nos sirvió para hacer nuestro primer alto en el camino al superar la barrera de los 2000 metros.
A esta altura comenzamos a cruzar diversos neveros, muchos de ellos tan cargados de nieve que dudo que terminaran muriendo durante el verano. Lo mejor fue que gracias al blanco de la nieve pudimos ver fácilmente grupos de muflones y cabras montesas buscando comida en la parte baja de la montaña.
Lamentablemente el día se comenzó a poner bastante feo y la lluvia no tardó en aparecer. Sin posibilidad de refugiarnos decidimos seguir el camino hasta que 1 hora después cesó de llover y pudimos secarnos levemente con los escasos rayos de luz que pasaban a través de las nubes.
Llegamos hasta lo alto de un paso situado a 2358 metros (Čez Hribarice) y como la montaña es como es… lo tendríamos que bajar con el castigo de que el Triglav estaba completamente oculto bajo mas nubes.
Bajamos hasta los 2164m en un paso llamado Dolič desde donde ser veía el refugio Koča na Doliču, usado principalmente cuando la cosa se pone fea para llegar al Dom Planika.
Ya quedaba menos para llegar al refugio y el Triglav comenzaba a despejarse, augurio de la buena suerte que tendríamos al día siguiente. Nos quedó pasar unas cadenas y un gran zig zag hasta la base del Dom Planika el cual no aguardaba completamente vacío y con el Triglav presidiendo el paisaje.
Día 3: Subida al Triglav
A la mañana siguiente nos levantamos sobre las 5:00AM pensando en caminar durante 30 minutos de noche hasta alcanzar la primera parte con cadenas ya a plena luz del sol. El inicio se planteaba fácil y ya vimos otros montañeros derechos hacia la cumbre por lo que tomar el camino fue sencillo.
Al principio no se veía apenas lugar para poder atravesar este gigante de piedra hasta que llegamos a un corredor de donde colgaban unas cadenas que te llevaban hasta la cresta de la montaña. Desde aquí la cosa cambió y las vistas hacia el otro valle eran espectaculares y el buen tiempo reinante auguraba un magnífico día.
Desde ahora la mayor parte del camino era una suerte de cadenas con las que había que prestar atención en cada paso que dábamos pero que en ningún caso eran de gran dificultad. De todas maneras, al final de la cresta reinaba imponente el Triglav y para alcanzar su cima teníamos que trepar una pared completamente vertical desde donde comenzábamos a ver gente.
Una vez en la pared fue cuestión de usar los arneses por seguridad y seguir la vía ferrata hasta al final, viendo que mucho esloveno ni llevaba casco y tampoco arnés, desafiando a la montaña en todas sus facetas. Cada uno hace lo que quiera y locos hay en todos los lados.
Pasado el tramo mas delicado, solo teníamos que darnos la vuelta y disfrutar la espectacularidad del paisaje, con el refugio Triglavvski al fondo.
Desde este punto no tardamos en llegar a la cima, el punto mas alto de Eslovenia. El esfuerzo había merecido la pena con creces y pasar alrededor de una hora en este punto fue todo un regalo. Posteriormente optamos por bajar al refugio de Planika por el mismo camino y desde aquí tomar el camino hacia Rudno Polje pasando por el refugio Vodnikov. Todo este trayecto está documentado en el artículo sobre la ascensión al Triglav desde Rudno Polje.
Datos prácticos
¿Cuando ir?
Muchos refugios están cerrados hasta principios de Junio, dejando un número de camas muy reducido y sin guarda. Lo ideal es ir de Junio a mediados de Septiembre, principalmente este último mesal registrarse menos lluvias.
¿Cómo llegar?
Nosotros llegamos en coche de alquiler hasta el lago Bohinj pero se puede llegar en bus desde Ljubljana en algo mas de 2 horas y de manera gratuita. Mas información aquí.
Existen servicios de Taxis en la zona.
¿Qué llevar?
Durante el mes de verano suele haber temperaturas suaves las cuales se acusan bastante durante la noche, pero si pernoctas en refugios no sería un gran problema y no deberíamos llevar exceso de abrigo. Si bien es cierto un cortaviento, goretex, capa de agua adicional, casco, arnés y un cabo de anclaje ó línea de vida es necesario, especialmente en la subida al Triglav.
¿Es peligroso subir el Triglav?
Ni si ni no. Montañeros experimentados dirán que no reviste gran dificultad y gente sin experiencia lo pueden pasar mal, especialmente aquellos con poco fondo físico. No obstante debéis tener en cuenta que aquí suben todos los eslovenos, montañeros o no… por lo que está lo suficientemente bien equipado para que cualquier persona sin vértigo pueda realizar la ascensión siempre que lleve el material adecuado… Aún así, vi una pareja sin casco, arnés, …., etc, un par de descerebrados…
¿Dónde dormir?
Hay una red de refugios muy buena, pero durante esta parte de la ruta pasamos por los siguientes alojamientos :
- Refugio Planika : 82 camas. Reservar con antelación dado que puede llenarse.
- Refugio Vodnikov : 32 camas aproximadamente. No se necesita reserva.
- Rudno Polje : el hotel donde parte la ruta y está la pista de biatlon. No es muy caro, unos 48€ con desayuno.