Parque Güell, una de las maravillas de Antonio Gaudí, nos va a permitir dar entrada una serie de artículos sobre nuestras experiencias vividas en Barcelona a través de consejos y datos útiles como horarios, trucos, hoteles recomendados y tarifas para que puedas disfrutar de tu estancia en una de las capitales del mediterráneo.
Podíamos haber empezado por lugares más emblemáticos como la Sagrada Familia, las Ramblas o la Casa Milá, pero hemos decidido contaros nuestra experiencia desde arriba, desde las faldas de una pequeña montaña que nos promete una de las mejores vistas de Barcelona.
Una visita a Parque Güell
Todo sobre este viaje
Nuestra experiencia
Barcelona siempre ha sido como un segundo hogar, después de todo la hemos visitado decenas de veces tanto por trabajo como para ver a grandes amigos. En muchas de esas visitas acabamos en el Parque Güell, quizá por nuestra devoción al pedazo de artista que es Gaudí o por disfrutar de un atardecer con vistas de la monumental Barcelona.
Curiosamente cada vez que lo hemos visitado hemos llegado a pié y desde el centro, dándonos una pequeña paliza subiendo hasta la ladera de la montaña donde está ubicado el parque.
El Parque Güell no es parque que digamos de grandes dimensiones. En su momento este parque fue concebido para construir viviendas de lujo dentro de un marco incomparable y en plena naturaleza. El empresario catalán al que dio nombre el parque, Eusebi Güll, pensó que la falda de esta montaña, lejos del centro de la ciudad en su momento, podría ser un lugar perfecto para la alta aristocracia catalana, pero su proyecto fue un fracaso y décadas después los hijos de Eusebi Güell decidieron donar la obra al Ayuntamiento de Barcelona para convertirlo en un parque público.
Salvo por lo que acabamos de comentar, caminar por este parque no da la sensación de estar en una obra «inacabada», ya que el complejo residencial que nunca se llegó a construir y del que solo se vendieron dos parcelas, la de la actual Casa Trías y lo que es actualmente la Casa-Museo de Gaudí, lo cubre este artístico parque con sus recovecos y jardines.
De todas formas aunque nos pudiéramos imaginar una urbanización con grandes mansiones de lujo, algo que quizá hubiera dado más valor a Barcelona, lo que nos ha dejado Gaudí es más que suficiente. Si tuviéramos que destacar algo de este parque sería:
- Los pabellones de la entrada
- El famoso dragon de la escalinata, más que un símbolo de Barcelona
- Los Jardines de Can Artigasson
- Los viaductos, tan extraños y diferentes
- La Casa-Museo Gaudía
- La sala Hipóstilla
¡Ojo!. Recomendamos no con coincidir con los horarios de los grandes cruceros, por lo que la última hora de la tarde es la mejor hora para visitarlo
Horarios y tarifas
Recientemente el Parque Güell ha dado la posibilidad de poder adquirir la entrada desde Internet de cara a evitar colas. El Parque Güell está limitado a 400 personas y es fácil quedarse sin poder verlo si te cruzas con alguno de los grandes cruceros que amarran en Barcelona. A parte, adquirirla por Internet te evitará las grandes colas a la entrada.
Horario del Parque Güell
Los horarios de acceso al parque son los siguientes:
- Temporada alta: de 8.00h a 21.00h (a partir de las 21.30h, el acceso es libre)
- Temporada baja: de 8.30h a 17.30h (a partir de las 18.15h, el acceso es libre)
- Temporada media: de 8.00h a 20.00h (a partir de las 20.30h, el acceso es libre)
Tarifas
- Entrada general: 7€
- Menores de 6 años: 0€
- Niños de 0 a 6 años: 4,90€
- Mayores de 65 años: 4,90€
Hoteles recomendados
En una de nuestros múltiples visitas optamos por uno de los hoteles de la cadena HCC Hotels, ya que dispone en pleno centro de Barcelona de 7 hoteles con excelentes calidades.
